La Traición que se prepara.

Por Ana Julia Mena Montesinos “Alana”-Blog Alana Cubana 1962

Mi tesis es que la declaración de julio (2014) del chivato Ernesto Vera, plagada de incoherencias, es un intento de sentar un estado de opinión muy PELIGROSO.

A saber: CUALQUIERA QUE CRITIQUE LOS MÉTODOS Y MANERAS DE LA UNPACU es… un chivato igual que él “era”.

Es más, cualquiera que critique los métodos y maneras de cualquier disidente en Cuba… es chivato igual que él “era”.

Y aún es más, cualquiera que critique los métodos y maneras del propio Vera… que se niegue a re cargarle el móvil que no usa, que cuestione su trayectoria, que lo bloquee o se ría de él en twitter o que dude de su sinceridad y de sus datos esquizofrénicos con las fechas cambiadas… es chivato, como él “era”. Y ya no es, por la gracia de dios, desde que se cayó del caballo, como Saulo de Tarso, en el camino a Palmarito de Cauto y vio la luz, por porrazo divino.

Cobertura perfecta para chivatos infiltrados del G2, que solo por estar en Cuba “jugándose la vida” no deben ser tocados ni con un pétalo de rosa, hagan lo que hagan y estafen a quien estafen. Y amenaza solapada al exilio, cuyos miembros, incluso los que llevan décadas oponiéndose a Castro y tienen un sólido prestigio en la comunidad exiliada, pueden ser acusados y puestos en duda desde Cuba, sin la más mínima prueba, que no son, por lo visto necesarias.

Sorprendente que la UNPACU respalde los muchos disparates de este tipo, haga declaraciones conjuntas, y reafirme su inocencia; aunque no tan sorprendente si se tiene en cuenta el primer punto que afirmo. Vera, en su calidad de “testigo protegido y ex miembro del G2″ está listo para acusar a quien sea que se atreva a criticarlos, y ponerlos en la picota pública, solo con decir que “El coronel Samper le dijo…” y la lista acusados del coronel Samper es un saco sin fondo, puesto que no se le exigen ni pruebas ni coherencia… Lo cual facilita muchísimo que declare lo que quiera.

Eso genera AUTOCENSURA para muchos ¿A que sí? ¿Que levante la mano el que quiera ver su nombre en la lista de “Secuaces de Samper”, que se puede estirar como un chicle, con la venia del “mayor grupo opositor en Cuba”? La gente suele tratar de evitar esos problemas. Y si para un exiliado, una acusación así puede ser molesta y ofensiva, para un disidente en la propia Cuba, sobre todo si depende de ayudas desde afuera, si anda aspirando a conseguir visado a cualquier sitio, o mantenerse a salvo simplemente, ya ni hablo.

Oponerse ahora mismo a José Daniel Ferrer, y que Vera lo acuse, de ser también “Agente de Samper” puede ser todo un drama. Da igual quien sea. Incluso Berta Soler, dirigente de las prestigiosas Damas de Blanco, ha tenido que presenciar, impotente, como su organización se desmiembra en Oriente y ella misma es acusada. Ni su veteranía ni sus buenas relaciones internacionales han impedido que se les ponga en titulares feos por toda la Internet. Obra todo del entorno de Ferrer, del cual Vera forma parte. Y puesto que el auténtico “Samper” no es manco y sabe bien a lo que juega, es previsible, que los disidentes que se pongan “pesados” estén en el pico del aura, lo de Soler solo ha sido “un aviso”.

Porque lo que parece un intento por parte de la UNPACU, de monopolizar la disidencia en Cuba, tragándose o debilitando hasta la extinción a otros grupos más pequeños y menos agresivos, con la ayuda de un tipo tan poco recomendable como Vera,(en la foto: los compinches Ferrer y Vera)no puede estar pasando desapercibido por la Policía Política de Castro, ni hacerse sin su consentimiento. La misma policía política que metió preso casi 20 años a Antúnez por gritar “Abajo el Comunismo” en un parque, pero no ha tomado represalias contra Vera por salir del “armario del G2″, y no le ha impedido siquiera seguir accediendo a Internet, que no se sabe quién le paga.

En lo que parece un “Acuerdo de Caballeros” (lo de caballeros es un decir) Ferrer usa a Vera para desprestigiar a sus detractores (a pesar de que sabe que miente más que habla) y Vera usa el respaldo de Ferrer para mantenerse en el candelero haciendo su trabajo de zapa.

La Seguridad usa a Vera y a Ferrer para destruir o debilitar a otros grupos disidentes hasta que como en la película “Los Inmortales” solamente quede UNO.

Y un grupo o partido, y no muchos e imprevisibles, es lo que necesitan para  hacer una pantomima de elecciones sin sorpresas, luego de 2018 que Raúl Castro se retire, e instalar en Cuba, un sistema más cercano a la tropical desvergüenza medio capitalista de Venezuela o Nicaragua, que a la rigidez y productividad del neo comunismo en China.

A mí me parece obvio que los  mafiosos neo castristas, necesitan una contrapartida opositora digna de ellos. Y en eso están ahora.En la salida de las escena de cualquier líder carismático y la desaparición de cualquier grupo disidente independiente, hasta conseguir, recortando de mala manera “lo que sobra”  tallar a mano un bloque “unido” (y blandengue como el de la oposición “oficial” venezolana) con un solo “líder indiscutible” dispuesto a ir a unas urnas ficticias y perder con un digno 30 o 40%, por ejemplo. Con la legitimidad que le otorguen, una oposición capitulante y un 60% de votos “legales”, el candidato del sistema neo castrista (que aún no está perfilado) podrá conducir a Cuba a una seudo democracia “pluripartidista” a su medida, para que los inversionistas extranjeros ya no tengan ni la vergüenza ni los problemas que tienen ahora mismo para invertir en una isla esclava.

Porque ya no será oficialmente esclava, sino solo 3er mundista, corrupta, mafiosa y dominada por señores feudales locales que pagarán en fichas a sus siervos de gleba, como hacía un siglo antes el señor Ángel Castro, padre de estos hijos de puta,  y exigirán (se dice que ya lo están exigiendo) derecho de pernada a sus siervas, como precisamente hizo el viejo Angel con la madre de estos, mencionada ahí arriba.

Como se ve un estupendo cambio. Oriente ya está perdido, obviamente. En lo que parece un juego al gato y al ratón a largo plazo, se va a armando paso a paso el puzzle de la traición suprema al futuro de Cuba y de todos los cubanos.

Y todo empieza por el chivato Vera, de lengua por ahora imprescindible, dispuesto a informar a “La opinión pública mundial” que “el Coronel Samper le dijo”… lo que más les convenga a sus jefes.