Historia
de un sobreviviente.
Ing. Dionisio de la Torre.
Hollywood Florida Marzo 19, 2020
Ing. Dionisio de la Torre.
Hollywood Florida Marzo 19, 2020
Esta
historia puede ser mía o tuya, quizás la tuya sea mucho más interesante que la
mía o quizás no, da igual, cada uno valora su factor de sobrevivencia a su
medida, pero el objetivo nuestro es traerte solo un poco de tranquilidad y para
que veas, si estás leyendo que eres un sobreviviente de muchas cosas; es
posible que lo mío no sea lo tuyo o quizás hayas pasado por cosas peores que
yo, mejor aún tendrás más fuerzas y esperanzas.
Comenzare
que un buen tiempo antes de nacer, ya estuve en problemas, nadie aseguraba que
podría respirar este aire, algunos pensaron que moriría en el vientre de mi
madre, pero gracias a Dios y al amor de mi madre, pude descansar, patear y
moverme mientras ella tuvo que estar en reposo total hasta ese día que no pudo
más y salí al mundo, grite, respire y dije!:ESTOY AQUÍ! No di las gracias, pero
eso lo he hecho durante toda mi vida.
Pude
sobrevivir a los extensos cuidados y preocupaciones de mi madre, sobreviví los
regaños, chancletazos, las eternas horas en el cuarto castigado por cualquier
bobería(a mi entender) pero aprendí por ejemplo(uno de ellos, pueden ser muchos
más), que un niño de cinco años no sabe pintar la casa del vecino a brochazos
de color rojo y pintura de aceite. Sobreviví a los eternos consejos de mi
padre, quien delego toda actividad disciplinaria a mi madre y el solo me
conversaba tranquilo y calmadamente explicándome la vida y que lo que se podía
o no hacer, pero generalmente me daba la razón, pero me decía, tenemos que complacer
(entiéndase OBEDECER) a tu madre, ella solo quiere el bien para ti, y así
sucedió hasta que los dos marcharon a mejor vida y todavía sigo escuchando sus
sabios consejos y oportunos castigos y chancletazos.
Como
casi todos, sobreviví la infancia, época difícil y dependiente del cuidado de
adultos, los gases que me ahogaban después de lactar y comer, las fiebres y
catarros, el aprender a comer, esos diente como me produjeron insomnio y poco
apetito, para que al final se cayeran, no sé qué fue peor si el salir o el que
me los sacaran y luego sobreviví las risas de mis amigos en la escuela hasta
que me toco reír a mí, sobreviví el sarampión, la varicela, la papera, rubéola,
gastroenteritis y los empujones en la escuela, sobreviví aprendiendo que hay
cosas que te curan para siempre sin tu querer y que otras tienes que prevenir o
aprender cómo sobrevivir.
Ya
más tarde en la vida, sobreviví la primera adolescencia, esa en que todo lo
sabemos y que algunos les dura poco y otros se ponen viejos y mueren con ella,
para algunos es incurable aunque la vida pruebe todo lo contrario. Sobreviví
años en escuelas al campo, estudio trabajo y fusil, sobrevivir la Guerra Fría y
el desembarco de los Yanquis, tan deseado por mucho, pero nunca llegó.
En
esa época sobrevivir el ser del pionero, del CDR, ser miliciano, pese a las
fiestas y las amigas, sobrevivir o mejor dicho debo decir escape de la gonorrea,
la sífilis, las ladillas, los piojos y pulgas todo gracias a los sabios
consejos de mis padres. Sobreviví una terrible apendicitis que se complicó y en
aquella época no había nada robótico y la cura era lenta, lo mejor de todo
fueron las visitas de mis “amiguitas’ que mientras vinieron a diferentes horas
a ver todo anduvo bien, pero cuando se enteraron me dejaron totalmente abandonado
en mi cama de enfermo y solo unos pocos amigos veían cuando no andaban con mis
amiguitas, condenado al reposo también fui condenado a ver dos canales de TV
donde se mostraban los logros de la Revolución y el programa Para Bailar y una radio que solo el programa
Nocturno servía para escapar la realidad. Gracias a Dios me enamore y case con
una mujer divina y ha sido lo mejor que me ha sucedido, creo que por eso a
partir de ese momento tenía algo muy importante para seguir sobreviviendo.
Fui
creciendo y sobreviví los asedios y persecuciones del régimen comunista y decidí
joder a Fidel Castro y no fue mucho lo que se hizo, pero si lo suficiente para
molestar un poco, no ha cambiado mucho mi conducta, solo que el tiempo pasa y
ahora todo es con más calma y menos peligroso, pero todavía he sobrevivido a
los que me atacan y me acusan, casi compiten con sus amos, pero sobreviví y
sobre vivo.
Regresando
a los Estados Unidos de América (donde nací) sobreviví la nostalgia, no mucha
porque no tenía tiempo, escuela y trabajo, esta vez sin fusil y luchando para
mí y los míos, pude llegar a donde quise, pese a haber sobrevivido al cáncer,
sobreviví terribles plagas, el Sitka, Évora, el nuevo milenio que sería el fin
del mundo, estoy sobreviviendo el
Calentamiento Global, el flus mata viejos, los asaltos y tiroteos, sobrevivir
los altos impuestos del pasado, sobreviví un plan de salud caro y malo.
En
fin, Uds. creen que esto nuevo, que no es tan viejo sino que ha cambiado para
joder más, me va a meter miedo, pues no, aprendo a sobrevivir y nada más, con
calma y cuidado, pero sobrepasando este momento que lo embarran con la
política.
Estén
tranquilos, que esto pasará y mañana por obra de Dios o por malas leches, algo
peor o similar surgirá y tenemos que sobrevivir hasta un día que todo sea mejor
para todos.
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