Entre corderos un chivo cabreado.
Por: Ing. Dionisio de la Torre,Jr.
Miami, Mayo 20, 2011.
Por: Ing. Dionisio de la Torre,Jr.
Miami, Mayo 20, 2011.
Hace unos días ha salido un video tomado en Marianao, la ciudad que progresaba, digo esto porque en este video se puede ver claramente el estado que están las calles- en tierra viva- y las aceras es algo del pasado capitalista, para que decir de la necesidad de pintura para las casas y sobre todo como la gente viste y se sienta en el suelo para ver a un cubano gritando desde un techo, gritando su verdad al mundo, sin miedo reclamando su derecho a decir. Algo normal en un mundo libre, un acto heroico en la Cuba esclava.
Salvando las distancias, pero no con menos merito cubano desafiando “al pueblo enardecido” que no apareció, ni se movió un centímetro para acallar la voz que acusa y desprecia a quienes han destruido a Cuba, como decía, me viene a la memoria una de las tantas narraciones del General José Miro Argenter de sus crónicas de la guerra de independencia durante la invasión a occidente, cuando describió como un negro mambí con la espalda contra una palma real que le servía de protección, pero más que eso era como un altar donde este valiente cubano peleando machete en mano contra cinco españoles entregaba su vida ante las lanzas y bayonetas hispanas, lleno de amor por la libertad propia y la de la patria amada. Este cubano subido en el techo de su castillo, carteles en las paredes, machete en mano y solo piedras, desafío a todo un gobierno, reto a que tomaran su castillo y seguro estamos que como su hermano mambí en aquel llano cubano estaba dispuesto a defender bien caro su voluntad de ser un hombre libre.
Cuan felices deben estar nuestros hermanos caídos en esta larga lucha, la honra y la vergüenza de los cubanos amantes de la democracia ha crecido en los últimos días, una brisa fresca perfuma nuestras calles cubanas con un simple acto de valor y dignidad, lástima que solo quedo el valiente denunciante, solo estuvo y quizás estará, pero a él solo le cabe el orgullo de poder decir- yo no llore como mujerzuela, yo denuncie a los traidores- solo estuvo y quizás estará por un tiempo, pero su voz llego más lejos que aquella cuadra cubana donde fue abandonado, pero no ignorado, ha llegado al mundo y ese mundo que hace poco acuso a las Castros por asesinos cuando mataron a Zapata hoy puede ver a otro cubano, un cubano negro, otro más que supuestamente fue liberado de la explotación por los comunistas, hoy grita voz en cuello el dolor que lleva en el alma y reclama como una hombre libre su derecho a disentir y acusar a quienes mal lo gobiernan.
En Cuba un chivo cabreado salto bien alto, desafiante lleno de la moral que tienen los que luchan al lado de justicia, su voz solo descanso cuando el quiso hacerlo, que bien debió sentirse, que desahogo sentiría cuando le escupió en la cara de los traidores todas sus verdades, no le importo ver como pasaban los corderos con la frente baja y el corazón amordazado, no tuvo miedo y es lo importante, no tuvo miedo a la respuesta de la porra, sin temor enfrento las consecuencias y pudo, porque si se quiere se puede, gritar a todo pulmón que él es un hombre libre aunque lo entierren vivo o muerto.
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